Presencia Alemana en Maracaibo

Reunión  dominguera de Alemanas, generalmente en los jardines de sus residencias a orillas del Lago

Alemanes en reunión social , Club del Comercio, fundado por ellos           

Los primeros alemanes que llegaron a Venezuela fueron los Welser negociantes y procedentes de Nurenberg quienes desde 1505 iniciaron actividades comerciales en Cubagua.

En 1574 Pedro Maldonado después de someter a los indígenas nombro el lugar como Nueva Zamora de Maracaibo.

Con clima cálido  sin mas agua que la proporcionada por el lago  y los jagueyes Maracaibo creció por su condición de puerto marítimo y  lacustre.

Desde 1580  Nueva Zamora de Maracaibo  recibía del interior de la región lacustre embarques de harina, jamones, bizcochos, cordobanes, y otros artículos para consumo propio y reenvió al Caribe; despachaba cargas de sal sebo, bálsamo y maderas  productos de la industria local.

Se cree que el primer Alemán que llego a Venezuela en el siglo XIX  fue Hernrich Meyer  quien en 1821 fundo en Caracas un negocio el cual le proporciono una  considerable fortuna.

Los alemanes se destacaron en nuestro país  como participantes en el desarrollo económico, como colonizadores, comerciantes e integrantes de nuestro desarrollo social e histórico. Monopolizaron el comercio de importación y exportación vendían mercancías europeas con cuyas ganancias compraban los frutos agrícolas producidos en las regiones andinas, especialmente café. Desplazaron rápidamente a otros comerciantes extranjeros debido a que manejaban grandes capitales.

Para finales del siglo XIX , los alemanes que venían a Venezuela eran contratados por empresas germanas  cuyas casas matrices estaban en Hamburgo  o en otros puertos con sucursales en nuestro país . Con el contrato se les entregaba una lista con el vestuario apropiado "camisas, ropa interior cuellos y puños duros, medias y trajes o fluxes de dril blanco , dormilonas, pañuelos y ropa de cama...vestidura de etiqueta que era indispensable para actos oficiales y fiestas"

El trabajo comenzaba a las 6.30 am  para tener las puertas abiertas a la 7 en punto. Entre las 11.30 y 12 del día se hacia una pausa para almorzar y tomar una corta siesta  volviendo a comenzar a la 1.30 pm para abrir a las 2 hasta aproximadamente las 5 pm.

Para el trabajo vestían  camisa con cuello duro y chaqueta, corbata y sombrero, a pesar de lo inclemente del clima

Edificio de la Casa Breuer

Directiva de la Casa Breuer & Moller

Directivos y empleados de la casa Breuer

Oficinas de la casa Breuer

Depósitos de la casa Breuer

Oficinas

 Algo que llama mucho la atención es que las grandes firmas alemanas como lo fue la casa Breuer tenia en su parte superior  habitaciones, cocina, comedor, sala de reunión y hasta un piano, esto para que los alemanes que llegaban a trabajar vivieran allí y no  se relacionaran con los nativos, era un grupo cerrado. Ellos fueron los que propiciaron la fundación de los primeros clubes como el club del Comercio, donde solo asistían ellos y posteriormente dieron cabida a nativos adinerados quienes de alguna forma estaban ligados a ellos

Jóvenes alemanes empleados de la casa Breuer departiendo en la azotea del edificio

 

Esos jóvenes, entre los que se encontraba Oscar Larsen, cuyo abuelo vivió en Venezuela en 1864 y trabajo en la Casa Bekman, regresando después a su país.y su padre que también trabajo en Venezuela en la casa Blohm en La Guaira y en 1903 se caso  con una chica de descendencia española, viviendo en  en Venezuela hasta 1908 cuando regresaron a Alemania. Oscar Larsen viene de nuevo  a Venezuela en 1924 contratado por la firma Breuer & Moller  para trabajar en Maracaibo, aquí ya estaba su tío uno de los socios de la firma y que en 1922 era presidente de la Camara de Comercio de Maracaibo.

De las cosas que admiraban Oscar Larsen y los otros jóvenes alemanes que llegaban a Maracaibo era  el sol esplendoroso,el cielo azul, los colores de las casas, las calles de tierra, lo escandaloso de la gente y sus gestos al hablar, las casas de un piso algunas con techo de paja pertenecientes a la población mestiza y las de dos pisos con techo de material pertenecientes en su mayoría a europeos y criollos adinerados. Les sorprendía también la limpieza de sus pobladores que se bañaban a menudo, las plantas exóticas, las palmeras, cocoteros, cardones y muchas cosas mas , diferentes a su país de origen.

Casas típicas de Maracaibo con colores fuertes y contrastantes

Chicas alemanas en sus residencias del Milagro con el lago a sus pies 

Disfrutando el aire fresco, al fondo la residencia

 

Los alemanes vivían en el Milagro, en las afueras de la ciudad, pues se consideraba el lugar mas fresco y generalmente las casas tenían el lago   como parte de las casas, construían  unas planchadas que comunicaban con las llamadas casas de baño ( donde se bañaban las mujeres  con una especie de bata larga y de tela de algodón). El agua del lago la utilizaban para, lavar, cocinar, beber y llenar los aljibes, para mayor comodidad de las familias instalaban tuberías del lago a la casa, de modo de disponer de agua en cualquier momento

Casa de baño en residencia del Milagro

Casas de baños, cada una pertenecía a una residencia

     


  


 







Una forma de distracción de los alemanes era organizar excursiones de caza
  y pesca a Palmarejo,Santa Rita Bachaquero, a esas excursiones

 se unían algunos criollos. Los fines de semana y en semana santa era común ver a estos hombres vestidos como para ir a un zafarí, con sus escopetas y acompañados de un baquiano, quien se ocupaba  de llevarlos  a lugares seguros y con abundante  caza. Sin embargo jueves y viernes santo los baquianos no salían  de cacería pues estos días eran  consagrados a la meditación y al reposo 

Alemanes y baquiano

baquiano

zona de pesca

Zona de caza